Domenikos Theotokopoulus, El Greco, nace en Heraklion el 1° de octubre de 1542, pintor con influencias bizantinas e italianas, en particular de Tintoretto y Tiziano, así como de Miguel Angel.
En 1576, llega a España, y se radica en Toledo, donde realiza lo más importante de su producción artística. Con un estilo muy personal, y espiritual, se caracteriza por la estilización, y emplea con originalidad los colores intensos azules, amarillos que preludia la pintura barroca, y el extraordinario movimiento de las composiciones, que tienen una disposición geométrica.
Entre sus muchas obras destacan: "El martirio de San Mauricio", "Entierro del conde de Orgaz", los retratos de "Fray Hortensio Feliz", "Paravicino". "Giulio Clovio", "El caballero de la mano al pecho", "Visitación", "Piedad" y "Adoración a los pastores".
Aunque pintó sobre todo obras religiosas, También pintó célebres retratos (Félix Paravicino) y algunos cuadros de temática diversa. De la conspicua producción religiosa de El Greco destacan: El Expolio de Cristo, El Bautismo de Cristo, la Adoración de los pastores y los retratos de diversos apóstoles.
El Expolio de Cristo
Sus figuras alargadas, pintadas con pincelada fluida, parecen criaturas inmateriales, carentes de solidez física e imbuidas de una intensa espiritualidad.
El Greco fallece en Toledo, el 7 de abril de 1614. Dejando una importante producción de obras pictóricas.
El Expolio de Cristo
Sus figuras alargadas, pintadas con pincelada fluida, parecen criaturas inmateriales, carentes de solidez física e imbuidas de una intensa espiritualidad.
El Greco fallece en Toledo, el 7 de abril de 1614. Dejando una importante producción de obras pictóricas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario