JUAN XII

Juan XII nace en Roma en 937, muere asesinado en 964. Fue electo con menos de 18 años de edad. Fue conocido como el papa "fornicario", hijo ilegítimo de Alberico II y por tanto nieto de Marozia. Tenía nula formación, tanto mundana como religiosa, tenía desinterés por lo espiritual, su afición a placeres groseros y su vida disoluta sin inhibiciones.

Durante su pontificado, considerado como uno de los más nefastos de la historia de la iglesia por su catadura moral, el rey Berengano II de Italia intentó extender su soberanía sobre territorios de la iglesia, lo que impulsó a Juan XII solicitar ayuda (960) al rey alemán Oton I. 

Oton penetra en Italia y toma Pavia y se dirige a Roma, donde es coronado emperador el 2 de febrero de 962, con esta coronación nacía el Sacro Imperio Romano Germánico. Juan XII y Oton rubricaron su alianza con un documento conocido como Privilegium Othonis por el cual el emperador confirmaba las donaciones territoriales hechas a la iglesia desde el reinado de Pipino el Breve. 

A cambio de la aplicación la Constitutio Lotharii, se establecía que los papas serían consagrados si su elección hubiese sido aprobada por el emperador de Occidente. Cuando Oton abandonó Italia, Juan XII rompe su fidelidad y busca alianzas con bizantinos, húngaros y príncipes italianos. Oton regresa a Roma, lo que obliga a Juan XII a huir de la ciudad. Oton depone al papa acusándolo de  vicios, pecados y delitos graves como el incesto, el perjurio, el homicidio y el sacrilegio. 

Juan XII muere asesinado de un martillazo en la cabeza, en mayo de 964, por un marido que había encontrado al papa  en el lecho de su mujer.