El amor verdadero es ese sentimiento que se vive en pareja, con el cual hemos soñado siempre, es una ilusión hecha realidad. Es desinteresado, incondicional, fiel y leal. Donde todo se entrega sin exigir nada a cambio, el amor trae consigo armonía y felicidad.
Según Platón, el amor es el que emana de la sabiduría, es decir, del conocimiento, de manera imaginativa o idealística y no de forma física. Conforme esta premisa, podemos amar más de una vez, por cuanto si no hay contacto físico, el afecto por una persona se transforma en un amor platónico.
Amar a alguien no solo es afinidad y química con una persona, son emociones, se trata de pensamientos y sentimientos. La atracción que se siente por una persona, es una conexión espiritual que produce un estado de felicidad inconmensurable.
Hay amores desinteresados, amistosos, lúdicos y románticos. También los hay apasionados, donde se actúa conforme las emociones, dejando atrás el razonamiento, donde destaca la atracción sexual, el deseo y la excitación. A menudo nos dejamos llevar por la pasión, por la emoción del instante.
También están esos amores prohibidos, aquellos que son infieles, que provocan ansiedad, deleite y placer porque es producto de un juego peligroso y secreto. Se activa la líbido, esa energía condicionada por factores hormonales, psicológicos y nerviosos.
¿Podemos enamorarnos y amar a más de una persona? Sí, en la vida nos encantamos con muchas personas, a las que nos entregamos con alma, pasión y vida, ilusionados en algo supremo. Pero, el encantamiento se termina pronto, y el fuego de ese amor languidece y se extingue.
En el amor la felicidad eterna no existe. Pero, poca felicidad es mejor que ninguna. Hay amores y desamores, enamoramientos y desencantos. Hay amores que nunca se olvidan. Amor solo es un sueño, que nace del deseo y necesidad de amar y ser amado.
También están esos amores prohibidos, aquellos que son infieles, que provocan ansiedad, deleite y placer porque es producto de un juego peligroso y secreto. Se activa la líbido, esa energía condicionada por factores hormonales, psicológicos y nerviosos.
¿Podemos enamorarnos y amar a más de una persona? Sí, en la vida nos encantamos con muchas personas, a las que nos entregamos con alma, pasión y vida, ilusionados en algo supremo. Pero, el encantamiento se termina pronto, y el fuego de ese amor languidece y se extingue.
En el amor la felicidad eterna no existe. Pero, poca felicidad es mejor que ninguna. Hay amores y desamores, enamoramientos y desencantos. Hay amores que nunca se olvidan. Amor solo es un sueño, que nace del deseo y necesidad de amar y ser amado.
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