Nuestro país tiene un campeonato de fútbol "mediocre", de mentira, parece un juego infantil para tardes de ocio en casa.
Con míseros 30 puntos un equipo puede salir campeón, tiene pasajes a la Libertadores y/o Sudamericana, dado estas mini competencias: Apertura y Clausura, que no son precisamente torneos que pudiéramos llamar serios.
En Europa se juega a dos bandas, de ida y vuelta, partidos con revancha, como debe ser. Años atrás en Chile se jugaba así, y el campeón y vice campeón iban a la Libertadores, pues habían hecho los méritos para aquello.
Esto de dividir el torneo, con liguillas de promoción, desnaturalizó la esencia de una competencia que era profesional y alejó la gente de los estadios. Era común ver el Nacional con 70 mil personas, en jornadas dobles de la liga. Sin escándalos, ni "Barras bravas" -Delincuentes- había más cultura y respeto. Jamás vi peleas, terminado un cotejo entre la U y Colo Colo, caminando por Campos de Sport en busca de locomoción.
Un deporte que era una fiesta, íbamos con la familia. En cambio hoy está en manos de corruptos, delincuentes, que se tomaron los estadios, y con sus actos vandálicos terminaron por correr a la gente decente de los estadios, ensuciando una actividad social y de sano esparcimiento.
Las Sociedades Anónimas tampoco ha sido un buen aporte, acá no funciona, esto no es Europa, aquí se viene a "ganar dinero fácil". Vemos hoy las inmensas deudas de los equipos grandes y pequeños, y, me pregunto: ¿dónde están los ingresos de los aportes de televisión y borderós que llegan al fútbol?
Ojalá algún día podamos ver Honestidad y limpieza en la ANFP, en los clubes, y barrer con las barras delincuenciales.
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