Hay mantos de dudas y sombras en torno a la muerte del presidente Salvador Allende Gossens, el 11 de septiembre de 1973, cuando la Moneda fue asaltada por el golpismo, auspiciado por la Derecha chilena, El Mercurio, Edwards, con el apoyo y complicidad de EEUU, Nixon, Kissinger y cía.
Se han escrito innumerables artículos, reportajes de la prensa escrita y audiovisual sobre lo acontecido en palacio ese fatídico martes 11. Unos dicen que se suicidó, otros que lo asesinaron, la hija Isabel Allende, ha confirmado tésis del suicidio, se han realizado exhumaciones del los restos del presidente, y llegan a esa "conclusión".
Conforme otras versiones el presidente habría sido acribillado a balazos. La fotografía deja la impresión que fue baleado, cuando se encontraba en el salón esperando que ingresara la soldadesca traidora -comandada por Pinochet, Merino, Leigh y Mendoza- que se había tomado el palacio presidencial.
Puede ser que la verdad solo la conozcamos cuando se cumplan 50 años del golpe (septiembre 11 de 2023), entiendo que ese es el acuerdo de autoridades civiles y uniformados; y, recién entonces, se desclasifiquen los documentos que nos informen lo que realmente sucedió en la Moneda.
Cualquiera sea la verdad, es un hecho de la causa, de la historia, que el hombre del pueblo, elegido por una clase que tenía ideales y sueños, fue leal y consecuente, un demócrata que murió por la causa que había abrazado.
Un ejemplo: ¡Honor y Gloria al presidente Allende!
Se han escrito innumerables artículos, reportajes de la prensa escrita y audiovisual sobre lo acontecido en palacio ese fatídico martes 11. Unos dicen que se suicidó, otros que lo asesinaron, la hija Isabel Allende, ha confirmado tésis del suicidio, se han realizado exhumaciones del los restos del presidente, y llegan a esa "conclusión".
Conforme otras versiones el presidente habría sido acribillado a balazos. La fotografía deja la impresión que fue baleado, cuando se encontraba en el salón esperando que ingresara la soldadesca traidora -comandada por Pinochet, Merino, Leigh y Mendoza- que se había tomado el palacio presidencial.
Puede ser que la verdad solo la conozcamos cuando se cumplan 50 años del golpe (septiembre 11 de 2023), entiendo que ese es el acuerdo de autoridades civiles y uniformados; y, recién entonces, se desclasifiquen los documentos que nos informen lo que realmente sucedió en la Moneda.
Cualquiera sea la verdad, es un hecho de la causa, de la historia, que el hombre del pueblo, elegido por una clase que tenía ideales y sueños, fue leal y consecuente, un demócrata que murió por la causa que había abrazado.
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