domingo, 29 de enero de 2017

TORMENTA DE FUEGO

                                                   La impotencia de un niño


La tragedia que vive gran parte de la zona centro sur de Chile, da cuenta de la precariedad de país que somos. Seguimos siendo "tercermundistas" por acción y omisión. Ni cola de león ni cabeza de ratón, entrampados en la improvisación, en la irresponsabilidad de una sociedad de autoridades y pueblo mediocres.

                                    El pesar de un anciano que perdió su casa

No es primera vez que nos pasa, somos un país acostumbrado a las catástrofes y desastres de la naturaleza. La historia se repite con asiduidad,  jamás aprendemos de trágicas experiencias. Se construye viviendas donde no se debe. No se hacen debidos resguardos en el tema forestal. Levantamos hoteles sobre las rocas -camino costero Reñaca-Concón- con nula capacidad de evacuación en caso de un tsunami.


                                       Para muestra una elocuente fotografía

¿Alojarían en este hotel?... ¡En cada marejada el agua sobrepasa el cuarto piso!

Este es el Chile a medias que hemos construido, no cuidamos el agua, no nos preocupamos del ecosistema, ni hablar de temas sociales -delincuencia, educación, previsión, salud, trabajo, vandalismo- no hay un ente pensante que de un nuevo  rumbo a nuestra sociedad. Estamos amnésicos, idiotizados, sumidos en la incapacidad de cambiar, sometidos a un sistema que ha fracasado. 

¡Ni derechas ni izquierdas será la solución!... ¿Aprenderemos alguna vez?... ¡Es lamentable lo que nos ocurre!

No hay comentarios:

Publicar un comentario