jueves, 30 de agosto de 2018

ANCIANIDAD

Del que fui poco queda,
atrás dejé la juventud,
no vino conmigo, quedó 
muda en las aguas del pasado.

Soy sombra de mis sombras,
un pálido reflejo del ayer,
con el ánimo por los suelos,
confundido, apetecido por la muerte.

Sobreviviendo, pobre virtud
de una existencia vulnerable.
Se nace, se vive y se muere,
se consume el hombre en la tierra.

Vida en penumbras,
años grises de los mortales, 
con el cuerpo cansado, es la 
agonía del que fue y quiso ser.

No hay comentarios:

Publicar un comentario