domingo, 9 de diciembre de 2018

JAMES JOYCE


James Joyce nace en Rathgar, Irlanda el 2 de febrero de 1882 y fallece en Zúrich, Suiza el 13 de enero de 1941. Escritor irlandés, reconocido como unos de los más importantes e influyentes del siglo XX. Aclamado por su obra maestra Ulises. Junto con Marcel Proust, Franz Kafka y William Faulkner fue uno de los artífices de la profunda renovación de las técnicas narrativas, que conduciría a la definitiva superación del realismo decimonónico.

Estudió en el colegio de jesuitas de Belvedere, entre 1893 y 1898, año que se matriculó en la National University de Dublin, en la que aprendió varias lenguas y a interesarse por la gramática comparada. Tenía un espíritu riguroso y metódico, que se refleja en sus composiciones literarias más innovadoras y experimentales.

Manifestó cierto rechazo por la búsqueda nacionalista de los orígenes de la identidad irlandesa, y de preservar su propia experiencia lingüística, que guiaría su trabajo literario, le condujo a reivindicar su lengua materna, el inglés, en detrimento de la lengua gaélica. En 1902 se instaló en París, pero en 1903 volvió a Irlanda, donde se dedicó a la enseñanza. En 1904 se casa y se traslada a Zurich, donde vivió hasta 1906.

En 1907 aparece su primer libro de poemas Música de Cámara; en 1914 publica una serie de quince relatos cortos Dublineses, dedicado a la gente de Dublin. Durante la Primera Guerra Mundial vivió pobremente con su mujer y sus dos hijos en Zurich y Locarno, La novela irónica semiautobiográfica Retrato del artistas adolescente, empezó a publicarse en 1914 en la revista The Egoist, y apareció dos años después en forma de libro en Nueva York.

Ulises (1922), novela experimental, se encuentran capítulos al modo periodístico. Inversión irónica de la Odisea de Homero, la novela explora meticulosamente las veinticuatro horas en la vida del protagonista, durante las cuales éste no intenta volver a casa porque sabe que su mujer le está siendo infiel.  

Durante la Segunda Guerra Mundial se trasladó de nuevo a Zurich, donde murió casi completamente ciego. La obra de Joyce está consagrada a Irlanda, aunque vivió poco tiempo allí, y siempre mantuvo una relación conflictiva con su compleja realidad política e histórica. 

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