Si pudiera yo saber
de ti, sería un regalo
del cielo, quisiera volver
a sentir un beso robado.
Libar tu cálida pasión,
el erotismo manaba
por tus poros, lágrimas
y sudor sabor a miel.
Tener tu cuerpo entre
mis caricias y abrazos,
y sentirte mía siempre,
como los días aquellos.
Cuánta pasión guardó
ese tálamo marginal,
cuando de tu piel canela
bebí tu elixir virginal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario