Discriminación es el trato diferente y perjudicial que se da a una persona por: su cultura, etnia, pensamiento político, orientación sexual, religión. Comportamiento social que produce desigualdades en el acceso a oportunidades y recursos tan disimiles como comida, clase social, educación, empleo, ingresos y salud a favor o en contra de otras personas, grupos o instituciones.
Existen grupos minoritarios que no están incorporados en la sociedad, están en subordinación perpetua y se refleja en la economía, en la política y en la vida social. Este tipo de discriminación es la más evidente, pues la vemos a diario. Grupos marginados de las decisiones, privados de ciertos derechos fundamentales, como la salud, la seguridad social y la educación, entre muchos otros.
Se discrimina a través del lenguaje, no solo son las palabras sino también las emociones, afectos, decisiones, preferencias, etc. Por medio del lenguaje aprendemos a discriminar ya que "aprendemos a nombrar a las cosas y a las personas a partir de nuestro entorno; al mismo tiempo, integramos prejuicios, matices despectivos, atribuciones arbitrarias" que son de común ocurrencia.
Discriminación por género: es toda distinción , exclusión o restricción en el sexo que tenga por objeto o resultado, menoscabar o anular el reconocimiento, goce o ejercicio de un derecho por género.
Discriminación contra la mujer: especialmente en el ámbito laboral, porque a igualdad de capacidades, conocimientos, y educación profesional con los hombres, se les da trabajos menores y con salarios más bajos que el de los hombres.
También discriminamos a los discapacitados, por razones de etnia, por embarazo, por edad, por condición jerárquica, por un tema religioso, por la orientación sexual de una persona, por personalidad, especialmente con esas personas que son introvertidas.
"Todos, en mayor o menor grado, somos discriminadores por alguna razón, causa o circunstancia. En lo personal, no me agradan y evito a las personas que no tienen cultura, porque de ellas no tengo nada que aprender, salvo perder el tiempo"
"Todos, en mayor o menor grado, somos discriminadores por alguna razón, causa o circunstancia. En lo personal, no me agradan y evito a las personas que no tienen cultura, porque de ellas no tengo nada que aprender, salvo perder el tiempo"
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