LOS PELUCONES

Pelucón (relativo singular de pelucones, en alusión al anacrónico uso de pelucas por parte de la aristocracia) es una denominación coloquial, habitualmente despectiva, con que se conocía en Chile, durante la primera mitad del siglo XIX al bando político conservador, sus rivales eran llamado pipiolos por los pelucones.

Primero, durante la independencia de Chile, se llamó pelucones, chapetones o realistas a los partidarios de conservar una relación de dependencia política respecto del Imperio español. Según Vicuña Mackenna, habrían sido los Carrera quienes bautizaron como pelucones a los diputados realistas e indecisos que se opusieron a acelerar la independencia en el Congreso de 1811. El bando sin estar organizado como un partido, respondía a los intereses de la aristocracia Santiaguina, que suele ser caracterizada como "castellana-vasca" en razón a los orígenes de las familias que la constituían.

Una vez declarada la independencia, el grupo se volvió más heterogéneo, congregando a todos quienes deseaban que el nuevo régimen tuviera una fuerte continuidad con el modelo político y social vigente durante la Colonia, Agrupó a los partidarios de un gobierno autoritario, cercano a la iglesia católica y que reservara la participación en cuerpos colegiados casi exclusivamente a las grandes familias tradicionales de la capital.

Los pelucones se unieron al grupo liberal que derrotó a O'Higgins, en 1823, , pues consideraban un agravio la reciente abolición de los títulos de nobleza y el uso de sus escudos familiares. Al poco tiempo los pelucones se oponían a los pipiolos, los acusaban de haber sumido el país en la anarquía. De haber ensayado libertades públicas inadecuadas para la realidad social chilena entre 1823 y 1829, durante el período conocido como Organización de la República.

Tras la batalla de Lircay, en que fueron derrotadas las fuerza liberales, se hicieron con el gobierno, iniciando el período de la Historia de Chile conocido como República Conservadora.