Santísima Trinidad
La Trinidad: ¿Enseñanza de Dios o de hombres?
Muchas religiones antiguas, paganas, adoraban dioses trinos. Como ejemplo: El Hinduismo enseña que el Dios Brahma tiene tres formas: Brahma el Creador, Visnú el Conservador, y Siva el Destructor.
En los cristianos primitivos se infiltró filosofía griega, especialmente en los campos de la doctrina trinitaria y de creer en un alma inmortal. "Los padres de la iglesia empezaron a buscar en la terminología filosófica, dos buenos términos para designar la realidad de lo distintivo de cada miembro de la Trinidad individualmente, y el otro se usaría para designar la unidad común subyacente de esos miembros". Sin embargo, tuvieron que admitir que "el concepto, de un Dios trino y uno, es un misterio que no puede ser resuelto por la razón humana".
Pablo había reconocido claramente el peligro de tal contaminación y 'perversión de las buenas nuevas' cuando escribió a los cristianos gálatas y colosenses: "Cuidado: quizás haya alguien que se los lleve como presa suya mediante la filosofía y el vano engaño según la tradición de los hombres, según las cosas elementales del mundo y no según Cristo" (Gálatas 1: 7-9; Colosenses 2: 8; 1Corintios 1: 22, 23)
La trinidad de Platón es un re-arreglo de trinidades más antiguas que se remontan hasta pueblos más primitivos, parece ser la trinidad racional de atributos de índole filosófica que dio origen a las tres hipóstasis o personas divinas respecto de las cuales enseñan las religiones cristianas. El concepto que tuvo este filósofo griego de la divina trinidad, puede encontrarse en todas las religiones antiguas del paganismo. (Nouveau Dictionnaire Universel, París, tomo II, pág. 1467)
De acuerdo con el Credo Atanasiano hay tres divinas Personas, y se dice que cada una es eterna, cada una es todopoderosa, ninguna es mayor que la otra, y cada una es Dios, y que, no obstante, juntas son un solo Dios. ¡No es una enseñanza bíblica! "Ni la palabra Trinidad, ni la doctrina explícita como tal, aparecen en el Nuevo Testamento; tampoco se propusieron Jesús y sus seguidores contradecir el Shema del Viejo Testamento (Deuteronomio 6: 4) The New Encyclopedia Britannica, 1976, Micropaedia, tomo X, pág. 126.
"La formulación 'un solo Dios en tres personas' no quedó firmemente establecida, y ciertamente no se asimiló por completo en la vida cristiana ni en su confesión de fe, antes del siglo IV. Pero es precisamente esta formulación la que originalmente reclama el título de el dogma trinitario. Entre los padres apostólicos, no había existido nada que siquiera remotamente se acercara a tal mentalidad o perspectiva (Nueva Enciclopedia Católica, 1967, tomo XIV, pág. 299).
Las Sagradas Escrituras nos enseñan el nombre personal del Padre: Jehová. Informa que el Hijo es: Jesucristo. Pero en ningún lugar de las escrituras se aplica un nombre personal al Espíritu Santo. No son tres personas distintas, son dos personas distintas: Dios el Padre, un solo Dios; Jesús el Hijo, menor que su Padre, y el Espíritu Santo, energía divina o fuerza vital, no es persona. Hechos 7: 55, 56 informa que a Esteban se le dio una visión en la que vio: a Jesús de pie a la diestra de Dios", pero en ninguna parte se menciona que viera al espíritu santo. (Apocalipsis 7: 10; 22: 1, 3).
"La mayor parte de los textos del Nuevo Testamento revelan que el espíritu de Dios es algo, no alguien, esto se ve claramente en el paralelismo entre el espíritu y el poder de Dios" (Nueva Enciclopedia Católica, 1967, tomo XIII, pág. 575) "Los apologistas, escritores griegos cristianos del siglo II, hablaron con demasiado titubeo respecto al Espíritu; con cierta medida de expectación, de manera bastante impersonal" (Nueva Enciclopedia Católica, 1967, tomo XIV, pág. 296).
Tanto la palabra hebrea Shad-dai como la palabra griega Pan-to-k ra'tor se traducen Todopoderoso. Ambas palabras de los lenguajes bíblicos originales se aplican en muchas ocasiones a Jehová el Padre (Exodo 6: 3; Apocalipsis 19: 6). Jamás se aplica ninguna de estas expresiones al Hijo ni al espíritu santo. Jesús dijo: "Si me amarais, os alegraríais, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre es mayor que yo" (Juan 14: 28). "Quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo" (1 Coriintios 11: 3) Está clarísimo que Jesús no es Dios, y que Dios es de rango superior a Jesús.
Con relación a la Trinidad, el Credo Atanasiano dice que sus componentes "son incomprensibles. A menudo los maestros de la doctrina dicen que es un "misterio". Obviamente tal Dios Trinitario no es el Dios que Jesús tenía presente cuando dijo: "Nosotros amamos lo que conocemos" (Juan 4: 22). La Iglesia Católica, y otras iglesias cristianas, han tergiversado y manipulado aviesamente la enseñanza bíblica. La mayoría de la gente, como no lee ni se informa, y porque anda por fe en una agrupación religiosa, no conoce los pecados de su iglesia
"Los hechos y verdades nos abren los ojos, la verdad por oculta y secreta que la mantengan las instituciones religiosas ¡Siempre llega a saberse!"
En los cristianos primitivos se infiltró filosofía griega, especialmente en los campos de la doctrina trinitaria y de creer en un alma inmortal. "Los padres de la iglesia empezaron a buscar en la terminología filosófica, dos buenos términos para designar la realidad de lo distintivo de cada miembro de la Trinidad individualmente, y el otro se usaría para designar la unidad común subyacente de esos miembros". Sin embargo, tuvieron que admitir que "el concepto, de un Dios trino y uno, es un misterio que no puede ser resuelto por la razón humana".
Pablo había reconocido claramente el peligro de tal contaminación y 'perversión de las buenas nuevas' cuando escribió a los cristianos gálatas y colosenses: "Cuidado: quizás haya alguien que se los lleve como presa suya mediante la filosofía y el vano engaño según la tradición de los hombres, según las cosas elementales del mundo y no según Cristo" (Gálatas 1: 7-9; Colosenses 2: 8; 1Corintios 1: 22, 23)
La trinidad de Platón es un re-arreglo de trinidades más antiguas que se remontan hasta pueblos más primitivos, parece ser la trinidad racional de atributos de índole filosófica que dio origen a las tres hipóstasis o personas divinas respecto de las cuales enseñan las religiones cristianas. El concepto que tuvo este filósofo griego de la divina trinidad, puede encontrarse en todas las religiones antiguas del paganismo. (Nouveau Dictionnaire Universel, París, tomo II, pág. 1467)
De acuerdo con el Credo Atanasiano hay tres divinas Personas, y se dice que cada una es eterna, cada una es todopoderosa, ninguna es mayor que la otra, y cada una es Dios, y que, no obstante, juntas son un solo Dios. ¡No es una enseñanza bíblica! "Ni la palabra Trinidad, ni la doctrina explícita como tal, aparecen en el Nuevo Testamento; tampoco se propusieron Jesús y sus seguidores contradecir el Shema del Viejo Testamento (Deuteronomio 6: 4) The New Encyclopedia Britannica, 1976, Micropaedia, tomo X, pág. 126.
"La formulación 'un solo Dios en tres personas' no quedó firmemente establecida, y ciertamente no se asimiló por completo en la vida cristiana ni en su confesión de fe, antes del siglo IV. Pero es precisamente esta formulación la que originalmente reclama el título de el dogma trinitario. Entre los padres apostólicos, no había existido nada que siquiera remotamente se acercara a tal mentalidad o perspectiva (Nueva Enciclopedia Católica, 1967, tomo XIV, pág. 299).
Las Sagradas Escrituras nos enseñan el nombre personal del Padre: Jehová. Informa que el Hijo es: Jesucristo. Pero en ningún lugar de las escrituras se aplica un nombre personal al Espíritu Santo. No son tres personas distintas, son dos personas distintas: Dios el Padre, un solo Dios; Jesús el Hijo, menor que su Padre, y el Espíritu Santo, energía divina o fuerza vital, no es persona. Hechos 7: 55, 56 informa que a Esteban se le dio una visión en la que vio: a Jesús de pie a la diestra de Dios", pero en ninguna parte se menciona que viera al espíritu santo. (Apocalipsis 7: 10; 22: 1, 3).
"La mayor parte de los textos del Nuevo Testamento revelan que el espíritu de Dios es algo, no alguien, esto se ve claramente en el paralelismo entre el espíritu y el poder de Dios" (Nueva Enciclopedia Católica, 1967, tomo XIII, pág. 575) "Los apologistas, escritores griegos cristianos del siglo II, hablaron con demasiado titubeo respecto al Espíritu; con cierta medida de expectación, de manera bastante impersonal" (Nueva Enciclopedia Católica, 1967, tomo XIV, pág. 296).
Tanto la palabra hebrea Shad-dai como la palabra griega Pan-to-k ra'tor se traducen Todopoderoso. Ambas palabras de los lenguajes bíblicos originales se aplican en muchas ocasiones a Jehová el Padre (Exodo 6: 3; Apocalipsis 19: 6). Jamás se aplica ninguna de estas expresiones al Hijo ni al espíritu santo. Jesús dijo: "Si me amarais, os alegraríais, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre es mayor que yo" (Juan 14: 28). "Quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo" (1 Coriintios 11: 3) Está clarísimo que Jesús no es Dios, y que Dios es de rango superior a Jesús.
Con relación a la Trinidad, el Credo Atanasiano dice que sus componentes "son incomprensibles. A menudo los maestros de la doctrina dicen que es un "misterio". Obviamente tal Dios Trinitario no es el Dios que Jesús tenía presente cuando dijo: "Nosotros amamos lo que conocemos" (Juan 4: 22). La Iglesia Católica, y otras iglesias cristianas, han tergiversado y manipulado aviesamente la enseñanza bíblica. La mayoría de la gente, como no lee ni se informa, y porque anda por fe en una agrupación religiosa, no conoce los pecados de su iglesia
"Los hechos y verdades nos abren los ojos, la verdad por oculta y secreta que la mantengan las instituciones religiosas ¡Siempre llega a saberse!"
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