Conocer la naturaleza es un deleite insaciable. Del mismo modo que ella nos da la vida, pongamos atención en estudiar la naturaleza del ser, como la vida misma. ¿Cómo hace la naturaleza al hombre? Todos los seres creados tienen un fin, un sentido, y un destino.
El destino y el sumo bien del hombre es el conocimiento. Buscar la excelencia del alma y su espíritu o energía vital. Es necesario conocer de todo un poco, y un poco de todo. El conocimiento si es pequeño es breve, apenas se aprecia, cae en la nebulosa del olvido. Se oscurece, pierde importancia. No hay luz que lo pueda hallar, se pierde del todo; pero, es parte de la vida.
Por tanto, debemos investigar -conforme el propio interés y talento de cada uno- cada una de las cosas y materias que vamos conociendo. Así la grandeza como la pequeñez, todo cuanto es en la naturaleza, desde el principio hasta el fin. El por qué somos, a qué vinimos y por qué partimos. Entender cual es el sentido de la vida y acercarnos a la sabiduría a través del conocimiento..
¿Cuál es la obra de la sabiduría? No engendró al hombre, recibió lo empezado por la naturaleza. No puede perfeccionar lo que no es susceptible de perfección, fuera del entendimiento. Su fin último es ordenar la vida conforme a la virtud, porque la virtud es la perfección de la razón.
"No dudemos en determinar el sumo bien como resultado de toda su naturaleza"
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