No soy escritor, no he participado en sociedades ni talleres literarios. Soy autodidacta, me inclino por la filosofía, la historia y las letras. Como la vida es mágica, de viejo me he interesado por la tecnología y he retomado el hábito de escribir artículos en mi Blog, sobre diferentes temas y los doy a a conocer a través de Twitter y Facebook.
He construido mi espacio, he inventado un lugar para mi, para hacer realidad mis sueños. En esta etapa de la vida, con tres cuartos siglos a cuestas, he vuelto a ser un hombre con fe y esperanza en el futuro. Mis escritos son vivencias, con pinceladas de ficción, de donde nacen temas para estos artículos.
La memoria tiene historia, no se puede hacer humo y nada. Los ideales, la fantasía y los sueños continúan vigentes en algún rincón de la mente. Los recuerdos renacen todos los días, no reniego de ellos ni cambio mi pasado porque fui feliz. Como la vida no termina de acabarse, hay que aprovechar el tiempo y lo que el destino nos depara.
Si a los demás, familia y no familia, les son indiferentes mis afanes ¡me importa un rábano! No busco honores ni reconocimientos, eso es una anécdota. Lo que hago me satisface, es mi mundo, el lado bueno de mi fuero más íntimo, un mundo sin fantasmas y de secreta felicidad.
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