Joaquìn Clausell nace en San Francisco de Campeche, México el 16 de junio de 1866, muere el 28 de noviembre de 1935. Pintor mexicano, abogado y activista, dedicó toda su obra al impresionismo. De formación autodidacta, su obra se enfoca en paisajes de México. Su padre, José Clausell, era un comerciante de origen catalán, y a la muerte de este la familia quedó desamparada, debiendo trabajar desde niño para ayudar a su madre.
Manzanillo
Fue inquieto y rebelde, lo que le causó muchos problemas. Se enfrentó en un discurso al gobernador de Campeche, Joaquín Baranda, que terminó por expulsarlo del estado. Viajó a Ciudad de México, con poco dinero, trabajó de lavaplatos, para continuar sus estudios en la Escuela Nacional de Ingenieros y posteriormente en la Escuela de Jurisprudencia, terminando sus estudios de abogado en 1892. A causa de su trabajo en el diario El Demócrata fue hecho prisionero en la cárcel de Belén, y no pudo presentar su examen profesional de título. El día del juicio huye, viaja a Nueva Orleans, luego a Nueva York y finalmente a París.
Canal de Xochimilco
En París entra a una exposición impresionista en 1896, queda maravillado, y decide pintar como los pintores que había observado. A fines de ese año, puede regresar a México, arregla su examen profesional y se titula en 1901. Por dedicarse a la abogacía, deja la pintura por un tiempo, pero a insistencia de sus amigos Gerardo Murillo y de Diego Rivera fue que decide retomarla entre 1920 y 1925.
El niño en el río
En Francia había conocido a Camille Pissarro y mantuvo una amistad con Émile Zola, quienes alentaron su vocación a la pintura. Regresa a México manteniendo la esperanza en los ideales revolucionarios, entregándose ya de lleno a la pintura a los 35 años. Entre sus pintura se encuentra una que dedicó a Van Gogh, Cézanne y Monet.
Fue inquieto y rebelde, lo que le causó muchos problemas. Se enfrentó en un discurso al gobernador de Campeche, Joaquín Baranda, que terminó por expulsarlo del estado. Viajó a Ciudad de México, con poco dinero, trabajó de lavaplatos, para continuar sus estudios en la Escuela Nacional de Ingenieros y posteriormente en la Escuela de Jurisprudencia, terminando sus estudios de abogado en 1892. A causa de su trabajo en el diario El Demócrata fue hecho prisionero en la cárcel de Belén, y no pudo presentar su examen profesional de título. El día del juicio huye, viaja a Nueva Orleans, luego a Nueva York y finalmente a París.
En París entra a una exposición impresionista en 1896, queda maravillado, y decide pintar como los pintores que había observado. A fines de ese año, puede regresar a México, arregla su examen profesional y se titula en 1901. Por dedicarse a la abogacía, deja la pintura por un tiempo, pero a insistencia de sus amigos Gerardo Murillo y de Diego Rivera fue que decide retomarla entre 1920 y 1925.
En Francia había conocido a Camille Pissarro y mantuvo una amistad con Émile Zola, quienes alentaron su vocación a la pintura. Regresa a México manteniendo la esperanza en los ideales revolucionarios, entregándose ya de lleno a la pintura a los 35 años. Entre sus pintura se encuentra una que dedicó a Van Gogh, Cézanne y Monet.
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