martes, 15 de octubre de 2019

VALENTÍN LETELIER


Valentín Letelier Madariaga nace en Linares el 16 de diciembre de 1852, muere en Santiago enl 19 o 20 de junio de 1919. Fue un abogado, político e intelectual chileno. Se especializó en los temas de educación y derecho administrativo. Fue miembro del Partido Radical y diputado por los períodos 1879-1882 y 1888-1891. Ejerció el cargo de rector de la Universidad de Chile entre 1906 y 1913.

Sus padres, Gregorio y Tránsito eran de ascendencia francesa vasca, respectivamente. A temprana edad se trasladó a Talca para seguir sus estudios en el liceo de esa ciudad, los que continuó en el Instituto Nacional, donde tuvo como profesores a Diego Barros Arana, Miguel Luis Amunátegui y Rodolfo Armando Philippi. En 1875 se recibe de abogado en la Universidad de Chile, con su memoria El poder municipal o la decentralización administrativa.

Una vez egresado asumió como profesor de literatura y filosofía en el Liceo de Copiapó. Durante su estancia en esa ciudad, Letelier escribió algunos artículos en el periódico El Atacameño relativos a la educación. Del auge de las ideas del positivismo, se convirtió a la masonería y se unió al Partido Radical. En 1879 fue designado diputado suplente por las comunas de Copiapó y Caldera, época en que se dedicó al periodismo, promoviendo las ideas liberales en lo tocante a la educación y los modos de reformarla.

En 1881 se casa con Mercedes Beatríz Matta, hija del poeta y político Guillermo Matta Goyenechea. En 1882, el gobierno lo designa como Secretario diplomático de la Legación de Chile ante Alemania, en Berlín. Observa el sistema educacional implantado por el Imperio alemán, el cual le parece adecuado para Chile, y lo difunde ampliamente. De vuelta en Chile se le encarga la tarea de compilar las sesiones de los Cuerpos Legislativos de la República, entre 1811 y 1845, tarea que le llevó cerca de 22 años. Participó en la fundación del Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile en 1889, escuela de formación de los Profesores de Estado. También impulsó la reforma de la Escuela de Minas de Copiapó.

En 1888 fue elegido diputado por Talca, cargo que finalizó en 1891. Fue opositor al gobierno de José Manuel Balmaceda, lo cual lo obliga a marcharse a Iquique, regresando a Santiago una vez depuesto el mandatario. Años más tarde se arrepentiría de haber apoyado a los congresistas en 1891. Fue designado fiscal del Tribunal de Cuentas, 1891, organismo que se considera antecesor de la Contraloría General de la República, se desempeñó en ese cargo hasta 1919, algunos meses antes de su fallecimiento. 


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