martes, 12 de noviembre de 2019

ARISTARCO


Aristarco de Samos nace en Samos, Grecia el 310 a.C. muere en Alejandría, Egipto el 230 a.C. Fue un astrónomo y matemático griego. Fue la primera persona que propuso el modelo heliocéntrico del Sistema Solar, colocando el Sol y no la Tierra, en el centro del universo conocido. Esta propuesta la hizo después de haber estudiado la distancia y tamaño del sol.

Aristarco fue uno de los muchos que hizo uso de la emblemática Biblioteca de Alejandría, en la que se reunían las mentes más privilegiadas del mundo clásico. Sus trabajos originales se perdieron probablemente en uno de los varios incendios que padeció la biblioteca de Alejandría. Del modelo heliocéntrico de Aristarco solo nos quedan las citas de Plutarco y Arquímedes.

En tiempos de Aristarco, la creencia obvia era pensar en un sistema geocéntrico. Los astrónomos de la época veían a los planetas y el sol girar a diario en torno a la Tierra. La Tierra, para muchos, debía encontrarse por ello en el centro de todo. Los planteamientos del conocido Aristóteles, hechos unos pocos años antes, no dejaban lugar a dudas y venían a reforzar dicha hipótesis. La Tierra era el centro del universo y los planetas, el Sol, la Luna y las estrellas se encontraban en esferas fijas que giraban en torno a la Tierra.

Algunos planetas como Venus y, sobre todo, Marte, describen trayectorias errantes en el cielo, es decir, a veces se mueven adelante y otras hacia atrás, lo cual está en flagrante contradicción con la tradición aristotélica, que decía que todos los movimientos y las formas eran círculos perfectos. Antes que Aristarco, Heráclides Póntico encontró una posible solución al problema al proponer que los planetas podrían orbitar alrededor del Sol y este a su vez alrededor de la Tierra.

El paradigma que dominaba era la Teoría geocéntrica de Aristóteles desarrollada a fondo siglos más tardes por Ptolomeo. No fue hasta los trabajos de Copérnico, unos mil seiscientos años más tarde, que empezó a plantearse el modelo heliocéntrico como una alternativa consistente. El único trabajo de Aristarco que ha sobrevivido hasta el presente, De los tamaños y las distancias del Sol y de la Luna, se basa en una cosmovisión geocéntrica. Es cierto que Aristarco no debió ser el único que creía en su hipótesis pero, en los textos antiguos se han borrado los nombres de sus sacrílegos seguidores. Al único al que se recuerda es a Seleuco, un astrónomo babilonio, que vivió un siglo después de Aristarco, y que retomó la teoría heliocéntrica con bases argumentadas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario